Fluyendo como la leche de la ubre caliente de una gran vaca amarilla.

1 jun 2011

¿Qué esperabais del silencio?






Considerando en frío, imparcialmente,

que el hombre fuma y tose, sin embargo,

se complace en su pecho acristalado.

Comprendiendo sin esfuerzo,

que el hombre se queda, a veces, pensando

y sujeto a tenderse como objeto matutino.

Considerando también

que el hombre es en verdad un animal.


Necesidad


Examinando, en fin,

las piezas de su pobre desesperación.

1 comentario: